El juez Vázquez Taín ha declarado que conoció en el curso de una investigación las fotos de Feijóo en el yate de Marcial Dorado y que no las tuvo en cuenta por no considerar que tuvieran relevancia judicial.
Nos ha sorprendido que, a raíz de dichas declaraciones y con una enorme celeridad, el Presidente de la Xunta haya manifestado que el Juez ha hablado y de este modo, ha acabado con la infamia.
Lo cierto es que no se sabe muy bien a qué se refiere Núñez Feijóo cuando habla de infamia y da la sensación de que le ataca un cierto nerviosismo que ya se traslucía en la comparecencia posterior a la publicación de las fotos.
Que sepamos, nadie le ha acusado de la comisión de delito alguno ni de haber llevado a cabo conductas reprochables más allá de la opinión que cada cual se pueda formar del contenido de las fotos publicadas y de su relación personal con el otro protagonista de las mismas.
Y, si esto es así, ¿a qué infamia se refiere? Sin duda, conociendo el talante de Feijóo, no creemos que considere una infamia el hecho de que un medio de comunicación haya procedido a la publicación de unas fotos que, como en el caso de Anxo Quintana y molesten más o menos, tienen un valor informativo dada la relevancia de las personas que en ellas aparecen (bueno, siempre dejando a salvo la doctrina de Ignacio González).
¿Cuál es la infamia? Y, sobre todo, ¿por qué conecta Feijó las declaraciones del juez Vázquez Taín con una especie de exculpación?